martes, 22 de junio de 2010

Cazar ballenas comercialmente podría dejar de ser prohibido

Agadir, Marruecos. AP La Comisión Ballenera Internacional (CBI) comenzó ayer su reunión más importante en décadas, en la que sus países miembros analizarán si suspenden una frágil prohibición de 25 años de caza comercial en favor de un régimen “más manejable y de caza controlada”.

El grupo ecologista Greenpeace realizó una protesta ayer en Roma contra la cacería de ballenas. AFP

Aunque grupos defensores del ambiente aseguran que la moratoria de 1986 ha sido una de las medidas de protección de la vida animal más exitosas de la historia, esta no logró evitar que Japón, Noruega e Islandia mataran a cientos de ballenas cada año, en contra de la orden de la Comisión. Desde entonces han muerto 30.000 ballenas sin que la CBI pueda evitarlo.

Una propuesta ante la Comisión, de 88 miembros, permitiría que los tres países limitaran la caza de ballenas a cambio de la suspensión de su estatus de naciones violadoras del actual convenio internacional y de imponer un período de 10 años de monitoreo.

El autor de la propuesta, el chileno Cristian Maquieira, presidente de la CBI, ha dicho que la nueva medida salvaría a 5.000 ballenas en 10 años. Maquieira no acudió a la reunión debido a una enfermedad.

Permitir una caza controlada también podría reducir el acoso de los conservacionistas que intentan interrumpir la caza de ballenas. Esa lucha acaba a veces en enfrentamientos violentos en altamar.

A poco de iniciarse la conferencia anual, el vicepresidente de la Comisión, Anthony Liverpool, aplazó las sesiones abiertas por dos días para dar a los países a favor y en contra de la caza una oportunidad para discutir si se puede llegar a una solución negociada.

La suspensión de la agenda normal de la reunión no tiene precedentes y demuestra la controversia existente alrededor de levantar la prohibición. La reunión termina este viernes.

Rechazo. En Chile, el Gobierno dijo el lunes que mantiene su oposición a la caza comercial de ballenas y a las capturas practicadas por Japón, Noruega e Islandia, pese a que el autor de la propuesta es el propio chileno Maquieira.

La Cancillería chilena aclaró la posición del Gobierno tras peticiones de legisladores oficialistas, de oposición y dirigentes de organizaciones no gubernamentales, que criticaron que Chile sea partidario de proteger a los cetáceos, mientras uno de sus embajadores, Maquieira, impulse el fin de la moratoria comercial por una década.

El Gobierno de Costa Rica, así como el llamado Grupo de Buenos Aires –integrado por los países de Latinoamérica donde el avistamiento de estos animales es un negocio floreciente–, se mantienen en contra de levantar la moratoria a esta cacería.

Puerta cerrada. Ayer defensores del medio ambiente denunciaron, entre otras cosas, la propuesta de la CBI de realizar negociaciones a puerta cerrada. Las organizaciones describieron la decisión como “fundamentalmente inaceptable”.

Wendy Elliott, de WWF International, dijo que todas las preparaciones para la reunión fueron llevadas a cabo en secreto, “es el momento de iniciar una discusión transparente y honesta”.

Muchos miembros de la Comisión se oponen a sancionar cualquier tipo de caza de ballenas. Otros podrían acceder a un acuerdo que imponga duras condiciones, para proteger a la mayoría de las especies en peligro de extinción y exigir que Japón frene sus incursiones en el Santuario Austral de la Antártida, donde un 80% de las ballenas de los océanos van a alimentarse.

Muchos miembros quieren también que paren las ventas internacionales de carne de ballena.

En el Santuario Austral, Japón utiliza arpones con cabezas explosivas para capturar a la mayoría de las más de 1.000 ballenas que mata anualmente, a menudo junto a sus crías.


Gracias a Marilu por la info

Fuente: http://tinyurl.com/3x7yszr